Clínica podológica especializada en el cuidado, prevención y tratamiento de los pies
Las alteraciones más comunes que sufren los pies son hiperqueratosis, micosis, onicomicosis, verrugas, entre otras, por consecuencia de malas acciones diarias que podríamos evitar o en caso contrario tratar las existentes.
El pie, esencial en la bipedestación y la marcha, es un elemento de alto riesgo en esta enfermedad, debiendo ser las personas que padecen diabetes especialmente cuidadosas. El podólogo desarrolla un papel preponderante en la prevención y tratamiento de las alteraciones que pueden padecer los pies en la vida cotidiana de estos enfermos.
Los pies están en continuo crecimiento durante la infancia, y en la adolescencia. En la última etapa se pueden observar algunas alteraciones debido a cambios anatómicos o hábitos diarios, para prevenir o tratar los mismo se debe acudir al profesional podológico de forma periódica.
Las personas de la tercera edad requieren una valoración periódica podológica continua, debido a las complicaciones relacionadas con los trastornos crónicos propios de la edad, tales como artritis, diabetes y trastornos vasculares.
Es importante equilibrar presiones y evitar la excesiva fatiga en ligamientos, músculos, tendones y articulaciones de deportistas, con el objetivo final de prevenir lesiones, así como tratar las existentes.
Es realmente importante mantener un seguimiento de la evolución de la pisada en niños, para detectar una patología a tiempo y aplicar un tratamiento para solucionar de raíz ese problema.